Si has recibido una citación judicial como investigado, probablemente te estés preguntando qué significa y cuáles son las consecuencias. En este artículo, te explicaremos en qué consiste ser investigado en un proceso penal, qué derechos tienes, y cómo un abogado penalista especializado puede ofrecerte el apoyo necesario durante esta etapa crucial. ¡No te preocupes, estamos aquí para ayudarte!
¿Qué significa ser investigado en un proceso penal?

Ser investigado en un proceso penal implica que la Autoridad judicial tiene sospechas de que has podido cometer un presunto delito. Esto no implica una condena, pero sí que estarás sujeto a un proceso de investigación para esclarecer los hechos y determinar la posible autoría del delito. Durante esta fase, el juez recabará todas las pruebas necesarias para tomar una decisión.
Derechos y protección para el investigado
Como persona investigada, tienes una serie de derechos fundamentales que deben ser respetados durante el proceso:
- Derecho a la defensa: Puedes designar un abogado que te represente.
- Derecho a guardar silencio: No estás obligado a declarar en tu contra.
- Derecho a conocer los cargos: Debes estar informado de la acusación que pesa sobre ti.
- Derecho a ser Informado.
- Derecho a examinar las actuaciones que son objeto de la detención.
- Derecho a designar un abogado de oficio.
- Derecho a la traducción e interpretación de toda la información.
¿Qué me puede pasar?
Si eres investigado por un hecho penal, el proceso penal se inicia con la fase de investigación, que es llevada a cabo por el Ministerio Fiscal o las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. Esta fase tiene como objetivo determinar si existen indicios suficientes para considerar que has cometido un delito y, en consecuencia, iniciar un procedimiento judicial formal en tu contra.
¿Qué puede ocurrir durante la fase de investigación?
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Llamado a declarar como investigado: Puedes ser citado a declarar ante la policía, el fiscal o el juez de instrucción en calidad de investigado (antes conocido como imputado). Durante esta declaración tienes derecho a no declarar o a contar con asistencia letrada, es decir, la presencia de un abogado, quien velará por que se respeten tus derechos.
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Diligencias de investigación: El órgano investigador llevará a cabo una serie de diligencias para reunir pruebas y esclarecer los hechos. Estas diligencias pueden incluir:
- Toma de declaración de testigos: Personas que hayan presenciado o tengan información relevante sobre los hechos pueden ser citadas a declarar.
- Intervención de comunicaciones: En casos graves, se puede solicitar la intervención de tus llamadas telefónicas o el acceso a tu correo electrónico o mensajes.
- Inspección ocular: Las autoridades pueden acudir al lugar de los hechos para realizar inspecciones oculares que permitan recoger evidencias físicas.
- Registro de domicilio o locales: Si es necesario y autorizado por el juez, se pueden realizar registros en tu domicilio, vehículo o lugar de trabajo para buscar pruebas.
- Informe pericial: En algunos casos, se pueden solicitar informes técnicos o científicos (por ejemplo, un análisis de ADN, huellas dactilares, o peritajes sobre documentos)

3. Medidas cautelares: Durante esta fase, se pueden dictar medidas cautelares para asegurar el buen fin del proceso, tales como:
- Prisión provisional: En caso de que existan riesgos de fuga, destrucción de pruebas, o de reincidencia, el juez podría dictar prisión provisional.
- Retirada del pasaporte: Para evitar que abandones el país.
- Orden de alejamiento: En casos de delitos contra personas, como violencia doméstica, se puede dictar una orden que te prohíba acercarte o comunicarte con la víctima.
- Embargo de bienes: Si hay riesgo de insolvencia o si se busca asegurar la responsabilidad civil que se derive del delito.
Ejemplos de diligencias de investigación
- Si estás siendo investigado por un delito de fraude, una diligencia común sería la auditoría de tus cuentas bancarias para verificar movimientos sospechosos.
- En un caso de violencia de género, las autoridades podrían realizar un reconocimiento médico de la presunta víctima para documentar lesiones.
- En una investigación por tráfico de drogas, podrían llevar a cabo un seguimiento y vigilancia para detectar más implicados o decomisar sustancias ilícitas.
Al finalizar la investigación, el Ministerio Fiscal y el juez decidirán si existen suficientes indicios para continuar el proceso penal. En caso afirmativo, se puede formalizar la acusación y se abrirá la fase de juicio oral, o si no se encuentra fundamento suficiente, se sobreseerá la causa y quedará archivada.
Es fundamental que cuentes con la asistencia de un abogado desde el inicio para garantizar que tus derechos se respeten a lo largo del proceso.
¿Qué puede hacer un abogado penalista por ti?
Un abogado penalista es esencial para guiarte a través de todas las etapas del proceso penal, especialmente en momentos en los que te enfrentas a una investigación o acusación por un presunto delito. Su intervención es clave para proteger tus derechos y aumentar las posibilidades de obtener un resultado favorable. Aquí te explico en detalle qué puede hacer un abogado penalista por ti:
1. Preparar tu defensa desde el principio
Una de las primeras cosas que hará un abogado penalista es analizar el caso en detalle para desarrollar una estrategia de defensa sólida. Esto implica:
- Estudiar las pruebas que la acusación pueda presentar en tu contra y buscar puntos débiles o inconsistencias.
- Evaluar si se han respetado los procedimientos legales durante la investigación (por ejemplo, la legalidad de un registro o una detención).
- Presentar las alegaciones necesarias desde el inicio del proceso para garantizar que tus derechos fundamentales no sean vulnerados, como el derecho a un juicio justo o a la presunción de inocencia.
El abogado se asegurará de que cada paso dado sea en beneficio de tu defensa y que se utilicen todas las herramientas legales disponibles para mejorar tu posición en el proceso.

2. Acompañarte en cada etapa del proceso judicial
El proceso penal puede ser largo y complicado, pero un abogado penalista te asistirá en cada etapa, proporcionando:
- Asesoramiento constante sobre los próximos pasos a seguir y qué esperar en cada fase.
- Representación en las declaraciones, tanto si eres llamado a declarar como investigado como si debes comparecer ante un tribunal.
- Defensa técnica en el juicio oral, si se llega a esa etapa, presentando argumentos ante el juez o tribunal para contrarrestar las pruebas y alegaciones de la acusación.
En cada una de estas fases, el abogado te informará de tus derechos, responderá tus preguntas y actuará como un intermediario entre tú y las autoridades judiciales.
3. Recolectar pruebas y testimonios que puedan exonerarte
El abogado penalista se encargará de realizar una investigación exhaustiva por su cuenta para apoyar tu defensa. Esto puede incluir:
- Recopilación de pruebas que demuestren tu inocencia o que mitiguen tu responsabilidad en los hechos.
- Entrevistar a testigos que puedan ofrecer información favorable para ti o que refuten los testimonios de la parte contraria.
- Contratar a peritos expertos para llevar a cabo informes técnicos, médicos o psicológicos que refuercen tu versión de los hechos o desacrediten las pruebas de la acusación.
El objetivo es presentar al juez una visión completa y justa del caso, con pruebas sólidas que favorezcan tu absolución o una reducción significativa de las penas.
4. Explorar otras alternativas legales
En muchos casos, no es necesario que el proceso penal llegue a juicio o que las consecuencias sean tan graves como parecen en un principio. Un abogado penalista tiene experiencia en buscar soluciones alternativas como:
- Sobreseimiento del caso: Si las pruebas en tu contra son insuficientes o se han cometido irregularidades en la investigación, tu abogado puede solicitar que el caso sea sobreseído (archivado) y que no se celebre un juicio.
- Acuerdo con la fiscalía: En algunos casos, puede ser posible llegar a un acuerdo con el Ministerio Fiscal para que se reduzcan los cargos o las penas a cambio de una declaración de culpabilidad limitada. Esto puede ayudar a evitar una condena más severa o incluso una pena de prisión.
- Solicitud de medidas atenuantes: Si se llega al juicio, tu abogado buscará presentar circunstancias atenuantes, como tu colaboración en el caso, arrepentimiento, o la falta de antecedentes penales, para reducir la pena.
En resumen, un abogado penalista no solo te representa ante el tribunal, sino que también actúa como tu defensor estratégico, protegiendo tus derechos en todas las fases del proceso, recopilando pruebas cruciales y buscando las mejores alternativas para minimizar el impacto de las acusaciones penales en tu vida.
Si has sido citado como investigado, no lo dejes al azar. Contáctanos hoy mismo para recibir asesoría legal personalizada y proteger tus derechos desde el primer momento.